Matricidio en Los Ángeles...

Hace varios meses mi amiga Vale me invitó a un matricidio... Yo accedí... Luego me dijo que era en Los Ángeles... "Wow", me dije... No problem, de ahí somos...

Llegó la fecha del matricidio y partimos en bus a Los Ángeles el Viernes 29 de Julio a las 11.59 PM. Llegamos a eso de las 6.30 AM del Sábado 30 de Julio y partimos al hotel, nos acostamos y dormimos bastante para recuperarnos del macabro viaje en bus que, por más que fuese en salón cama, no deja de ser incómodo... A eso de las 10 AM nos levantamos y bajamos a tomar el desayuno tipo buffet... Aprovechando que viene incluido en el precio, hicimos y deshicimos. Mi consumo fue el siguiente: una taza de te, 3 tostadas con mantequilla, mermelada de duraznos y jamón, una porción de frutas con yogurth de vainilla y un trozo de brazo de reina... Me fui rodando a la pieza del hotel... Llegando vimos una película que nos enganchó...

A eso de la 1 PM decidimos salir a pasear y conocer lo que esta ciudad nos tenía preparado. Averiguamos y nos fuimos a tomar un bus interurbano que nos llevara al Salto El Laja. Debíamos tomar el bus que se dirige a Yumbel y ahí partimos. Yo había pasado por ahí cuando pequeño (más pequeño) pero no me acordaba para nada. De repente nos detuvimos y nosotros métale combatiendo las lenguas de conversación y pelambre. Entonces partimos y al mirar afuera vi un puente... tuve un déjà vu... pregunté y esa había sido la parada nuestra!!! Así que partimos donde el chofer y le pedimos que se detuviera... Sólo habían sido unos metros que nos pasamos...

Al llegar, nos encontramos con un sendero que guiaba hacia el interior de la cascadita esta... Mucho barro... Mucha humedad... Mucho moho en la vegetación... Bastante pintoresco el asunto y mi amiga... con botas (sólo ella podía, pero menos mal no eran taco aguja). A medida que nos acercábamos se oía más fuerte el agua caer y golpeando las piedras... maravilloso! Como pueden ver, nos sacamos varias fotitos en tan hermoso paraje natural (zzz...).

Una vez que habíamos recorrido lo que este sendero nos mostraba, decidimos almorzar... Ahí mismo en el puente habían varias posadas que ofrecían variados platos típicos chilenos... Una señora salió de uno de ellos y nos ofreció el menú... Le pregunté si tenía pastel de choclo y nos dijo que no le quedaba... "Uf que lástima", repliqué, "pero tengo una cazuelita de vacuno" dijo, y en cuestión de segundos estábamos sentados adentro esperando nuestro plato (qué fáciles somos...). En el intertanto, comíamos pancito amasado calientito con pebre de la zona... delicioso!!! Luego la cazuela que estaba para repetirse, pero habría sido grosero... Al terminar salimos a la carretera a esperar el bus de vuelta, sin antes, obviamente, aplicar cigarrito para bajar la cazuela... y en medio de un frío espantoso!!!

Al cabo de unos 10 minutos llegó el bus... Nos subimos y avanzamos bastantes kilómetros hasta que llegaron a cobrarnos el pasaje, cuando el individuo nos dice "ustedes son los que se pasaron cuando veníamos de ida"... "Ok, muerte social en la VIII región"...

Cuando llegamos a la ciudad de Los Ángeles paseamos un rato por sus calles y qué creen? Tienda de botas que había, tienda que entrábamos... Y posteriormente tienda que salíamos... Los ojos de mi amiga eran como los de un cabro chico frente al Tip-Top!!! Llegando al hotel comenzó el emperifollamiento... La preparación para el matricidio... Debo reconocer que mi amiga Vale no se demoró tanto en arreglar... Creo que yo me di más vueltas... Lo que más tiempo tomó fue la alisada de pelo... de ambos... Jajaja.

Partimos a la iglesia en taxi (quedaba a unas 20 cuadras). Llegamos cuando ya estaban todos adentro así que nos ubicamos al final. La ceremonia fue muy corta, me gustó eso. El detalle fuera de lugar fui yo recibiendo una llamada por celular que, obviamente, fue estrepitosa porque tenía como ring tone el tema "Me and my imagination" de Sophie Ellis-Bextor... ya veía al cura bailando y haciendo la coreografía! Terminada la ceremonia llamamos al radiotaxi para dirigirnos al Club de La Unión de Los Ángeles. Otro cuadro de ridiculez: todos se habían retirado, la iglesia completamente enrejada y cerrada, y nosotros cagándonos de frío esperando el vehículo. Pero llegó y partimos.

Una vez en la celebración, nos hallábamos bebiendo champagne y algo-sour (porque no era pisco sour, ni mango sour, ni amaretto sour). Luego pasamos a sentarnos en las típicas mesitas distribuidas por familia. Nosotros con los primos chacoteros... Nos cagamos de la risa toda la noche. La comida estuvo muy rica. El detalle macabro fue la música. Es cierto que en todo matrimonio tocan cumbias y todo eso... Pero en este matrimonio fue sólo cumbias de Tommy Rey y reggaeton... Nada de rock latino ni algo kitsch... Para qué hablar de música moderna! En fin, igual bailamos su buen rato... La barra abierta estuvo muy buena: ron, pisco, whisky, vodka, Bailey's... de todo y en grandes cantidades. Al terminar la celebración, volvimos al hotel que estaba a media cuadra. No me acuerdo cómo habremos pasado frente a la recepción, y menos cómo subimos esa endemoniada escalera que cuando llegamos nos preguntamos si lo lograríamos. Nos acostamos al tiro. Recuerdo haber puesto el despertador para alcanzar a tomar desayuno (sólo lo sirven hasta las 10.30 AM).

A la mañana siguiente no tomamos desayuno... Nos pasamos de largo... Al levantarnos ordenamos las cosas y salimos de shopping... Obvio, mi amiga Vale me impulsó el sentimiento consumista y terminé comprándome unas pilchas bien bonitas qué más adelante me verán puestas...

A las 4 PM tomamos el bus de vuelta a Santiago... No estuvo tan malo el viaje... Igual dormimos harto porque estábamos muy cansados... Y con esas horitas más de sueño nos dio para salir esa noche llegando a la capital... Jajaja... Los weones prendidos!